Jaime Munguía (44-1, 35 KO) tuvo más problemas de los necesarios para detener al armenio-canadiense Erik Bazinyan (32-1-1, 23 KO), pero al final volteó todo a su favor en el décimo round donde echó toda la carne al asador para superar por la vía más contundente, el nocaut, a un rival que le salió más que respondón, pues Bazinyan logró meterle las manos a un Munguía que de nuevo demostró debilidades defensivas y falto de fondo físico, curiosamente ahora que Érik 'Terrible' Morales regresó a su esquina como su entrenador sustituyendo a Freddie Roach. Ahora el futuro de Munguía tiene muchas opciones interesantes en el horizonte, apareciendo nombres como el camerunés Christian Mbilli (28-0, 23 KO), el estadounidense Caleb Plant (23-2, 14 KO) o el neoyorkino Édgar Berlanga (22-1, 17 KO), aunque el tijuanense dejó ver la posibilidad de pelear ante su gente en Tijuana a finales de año con un rival de menor riesgo.
Duelo de Moles. Daniel Dubois (22-2, 21 KO) rompió todos los pronósticos y barrió el suelo con Anthony Joshua (28-4, 25 KO) --literalmente-- al enviarlo a la lona en cuatro ocasiones producto de los potentes golpes que Dubois conectó ante un Joshua fuerte de cuerpo pero débil de guardia, y que era favorito en las apuestas. Joshua besó la lona desde el primer round con un volado de derecha que entró directo a su mentón, después regresó al suelo en el tercer round gracias a una feroz combinación de más de 10 golpes, luego en el cuarto Dubois agarra con golpes a la cabeza pero con un Joshua mal parado, provocando su tercera caída, y por último la estocada final, cuando parecía que Joshua tomaba un segundo aire en la pelea y se le calentaba la quijada conectó a su rival con un fuerte derechazo pero Dubois aguantó bien y terminó por enviar a la lona de forma definitiva a la mole de músculos de una forma dramática. En ese momento Joshua sintió el verdadero terror y el cuerpo no le respondió, dejando una imagen que puede ser recordada como uno de los nocauts más impresionantes de este 2024.
Para muchos aficionados y expertos del boxeo Anthony Joshua es un boxeador sobrevalorado, pues desde que perdió su invicto contra Andy Ruiz ya no hemos visto nada extraordinario, contabilizando ya 9 caídas a la lona en su carrera, y cayéndose también la oportunidad de medirse ante Oleksandr Usyk en su siguiente pelea, chance que ahora tiene el ahora campeón mundial FIB Daniel Dubois que a sus 27 años se perfila como la nueva cara de los pesos completos, toda vez que se dé una revancha contra Usyk de nueva cuenta por el campeonato indiscutido de los pesados.
El zurdo mochiteco Luis 'Flechita' Castillo (21-1-1, 13 KO) no pudo contra el campeón filipino de peso paja Melvin Jerusalem (23-3, 12 KO) y perdió el invicto en una pelea en la que el filipino fue mucha pieza y defendió la localía en su país natal, enviando a la lona al sinaloense en el primer episodio. Esta fue la primera oportunidad titular para Castillo que a sus 27 años aún tiene un futuro promisorio por delante, a pesar de caer por decisión unánime con dos jueces dando 120-107 (todos los rounds perdidos) y otro que dio 118-109. México no cuenta con un campeón en este peso desde que el tapatío Osvaldo 'Gallito' Novoa perdiera su cetro ante el tailandés Chayaphon Moonsri "Wanheng Meenayothin", en un peso en el que Ricardo 'Finito' López se proclamó como el rey desde 1990 hasta 1998.
Ohtani GOAT. No hay adjetivo adhoc para calificar con plena justicia lo que Shohei Ohtani nos está demostrando con sus actuaciones este año después de inaugurar el club de 50 jonrones y 50 robos de bases, y hasta el corte de esta entrega el domingo por la noche, acumulaba 53 jonrones y 55 bases robadas, faltando seis juegos aún para que termine la temporada regular en MLB, lo que se traduce a por lo menos 24 oportunidades más para seguir subiendo la vara que ya de por sí es alta, tanto así que después de más de 120 años de historia y cerca de 20 mil peloteros que han militado en MLB, Ohtani es el único con tales números.
La lucha por el MVP se resume a un solo hombre, a pesar de que Marcell Ozuna de los Bravos goza de muy buenos números (.309, 38HR, 101 CP) estos se quedan cortos con los del japonés (.301, 53HR, 123 CP, 55 BR), ambos bateadores designados, pero con el hándicap de que Shohei lo está haciendo con una herida en su codo que sigue sanando después de someterse a la famosa Tommy John que lo marginó este año de lanzar, pero que le permitió al unicornio enfocarse en ir con todo con su demoledor swing, y con sus piernas sanas para hacer su robadero de bases.
Es tal el repunte que Ohtani ha tenido en su ofensiva en los últimos 10 juegos, que no nos dimos cuenta y ya está peleando de tú a tú con el otro animal, Aaron Judge de los Yankees, quien tiene 55 jonrones, solo dos más que el japonés, y la atención estará centrada en ver qué tanto se acerca Ohtani al Juez en el último día de la temporada, o si podrá superarlo.
Incluso nos surge la pregunta de qué pasará la próxima temporada que Ohtani pueda lanzar. Ya demostró que puede ser un bateador excepcional y si Ohtani se dosifica en 2025, podríamos hablar de una temporada ‘tranquila’ de 30 jonrones y 100 carreras producidas con al menos 30 bases robadas, y si demuestra que está al cien por ciento de su codo derecho y si mejora el comando de sus pitcheos, imaginemos que logra números que lo pongan en la pelea por el Cy Young en la Liga Nacional, hazañas de locura que podrían dejar al gran Babe Ruth no como un atleta de segundo nivel (lo cual ya es comparándolo con Ohtani), sino hasta un tercer nivel.
No me funen.