A lo largo de la historia, las mujeres han jugado un papel relevante en las decisiones de gobernanza local, regional y mundial para sí mismas y sus representados; así, las luchas de género han logrado avances importantes en la democracia y la consecución del reconocimiento de los derechos para ellas y sus hijas.
Existen muchos ejemplos sobre el trabajo de la mujer como líder de movimientos importantes que generan transformaciones en el mundo; baste recordar el trabajo e influencia de Eleanor Roosevelt en la redacción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1945.
El 20 de noviembre de 2021, la Organización de las Naciones Unidas decidió autorizar un día que celebrara el papel de las mujeres en el multilateralismo, con el fin de reconocer el papel que las mujeres organizadas llevan a cabo para fomentar la paz y el desarrollo desde sus diferentes ámbitos de acción.
¿Pero qué es el multilateralismo? La Unesco lo define como una acción colectiva, coordinada entre al menos tres actores, cuya convicción los reúne a trabajar juntos para resolver problemas, que, de manera individual, serían más complejos o imposibles de solventar.
En este sentido, a partir del 25 de enero de 2022 se celebra el Día Internacional de las Mujeres en el Multilateralismo, que tiene como objeto reconocer y promover el trabajo la mujer realiza de manera conjunta, para conseguir una causa en común, garantizando la igualdad de género como uno de los Objetivos de Desarrollo Universal, utilizando para ello los instrumentos, organizaciones e instituciones que “consagran los ideales de paz, justicia, igualdad, solidaridad, derechos humanos y libertades fundamentales, sin distinción de raza, sexo, lengua, cultura o religión”.
El papel que desempeña la mujer desde sus comunidades ha logrado importantes avances sociales, eliminando muchas de las barreras culturales que históricamente las ha sometido a las decisiones masculinas, en el ámbito de sus derechos, del desarrollo humano, educativo, laboral y político. Este esfuerzo, en muchos de los casos, ha llevado a escalar su labor para reunirse en luchas regionales, nacionales o internacionales para salvaguardar sus libertades, enriqueciendo su lucha y transformándola a través de la organización y la colaboración, compartiendo las experiencias locales y escalando sus propósitos para la consecución de sus objetivos, en una lucha sin fin por lograr un mundo más justo e igualitario.
Y es que el papel de femenino ha sido crucial en temas de seguridad, paz, y desarrollo desde siempre; este día tiene la intención de visibilizar ese papel, defenderlo y sostenerlo.
Por una parte, esta conmemoración pone en relieve el compromiso que las organizaciones e instituciones de los estados parte sostienen en favor del trabajo y el liderazgo de las mujeres, haciéndolo más inclusivo, valorando su esfuerzo y reforzando su labor y el compromiso con el que han escalado a diversos escaños sociales, políticos y culturales, para la toma de decisiones sobre ellas mismas y el mundo que las rodea.
En México, la paridad de género en materia electoral, que viene a contribuir para que sea postulado el mismo número de mujeres y hombres para ocupar puestos de elección popular para la toma de decisiones, es uno de los ejemplos más visibles; pero hay que ver alrededor del mundo, cuántas mujeres diplomáticas, miembros de organizaciones civiles y líderes de organismos mundiales han podido llegar a esos puestos.
Todavía queda un largo camino en este sentido, sin embargo, visibilizar el concepto de mujeres líderes es uno de los primeros pasos hacia la verdadera equidad de género.
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