La remodelación del Estadio Azteca no es una anécdota más, sino una visión al futuro para mantener el templo más grande del futbol en México y quizá en el mundo.
Tendrá por tercera vez una inauguración mundialista, algo que ningún otro estadio del planeta presume. Pero el costo ha sido desolador. El Azteca se fue haciendo viejo a los ojos de todos, menos de sus dueños.
El Mundial 2026 fue el escape para devolverle la vida. Una inyección de 3 mil millones de pesos, de los cuales el banco Banorte puso 2 mil a cambio de colgarle el nombre, fue el motor para remozarlo.
Una vez que acabe la Copa del Mundo, las autoridades del Azteca no quieren que quede en desuso y planean exprimir al máximo el recinto, no sólo con eventos deportivos, sino también musicales y de toda índole.
El Azteca albergará a tres equipos
Como ya sucedió al inicio del siglo, el Azteca tendrá en su seno de nueva cuenta a tres equipos históricos: América, Atlante y Cruz Azul, los dos últimos como inquilinos, aunque con la idea de que sean permanentes. En aquellos años el Necaxa era el que ocupaba el lugar del Cruz Azul que se había ido al Ciudad de los Deportes.
Se busca que cada semana haya dos partidos en el Azteca. Los sábados serán de las Águilas y Cementeros y los domingos pasarán a ser el picnic del atlantismo.
Lo que se busca evitar a toda costa es caer en el rezago como llegó a suceder entre 2006 y 2018 cuando sólo quedó el América como local y el estadio, a veces, llegaba ser ocupado cada 15 días. La remodelación ordena que eso no pase de nuevo.
Por eso, se planea dar auge desde julio de 2026, apenas termine la Copa del Mundo, para que en el plano deportivo no se detenga en los cinco meses que dura cada torneo que atrapa a los aficionados.
Música y más
La remodelación dejará al Estadio Azteca con una capacidad para 90 mil personas, con accesos confiables y vías de llegada mejoradas para los espectadores.
De ahí que se piense que a partir de enero de 2027 se puedan dar conciertos. El último fue del grupo RBD en 2023 para dar paso al remozamiento, pero con el estadio mejorado, se planea que haya eventos cada quincena.
El pasto híbrido que se colocó esta semana, resiste la presión y el peso distribuido con poco tiempo de recuperación, por lo que se pondrá a prueba con los eventos que planean hacer en cuanto acabe el Mundial y todo vuelva a la normalidad.
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Con información de Excélsior