Veinte personas del vuelo de Singapore Airlines que sufrió turbulencias extremas e hizo un aterrizaje de emergencia están en terapia intensiva en Bangkok, Tailandia.
Entre los heridos, hay ciudadanos de Australia, Reino Unido, Hong Kong, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Filipinas.
En el incidente durante el vuelo falleció un británico de 73 años.
El vuelo SQ321 de Singapore Airlines sufrió turbulencias extremas y repentinas sobre Birmania, a 11 mil metros de altura, diez horas después de haber despegado de Londres.
Según un pasajero, las personas a bordo del aparato fueron abalanzadas con tanta violencia que sus cabezas golpearon el techo, lo que causó graves lesiones a decenas de personas.
Fotografías tomadas en el avión muestran comida, botellas y equipaje por todo el suelo, así como máscaras de oxígeno colgando del techo.
Andrew Davies, un pasajero británico, contó a la cadena BBC que el avión cayó de repente y que hubo “muy pocas advertencias”.
Describió haber visto a gente con heridas en la cabeza.
"Las turbulencias eran increíblemente fuertes”, afirmó.
El director de Singapore Airlines, Goh Choon Phong, dijo lamentar “la traumática experiencia” vivida por los pasajeros.
"Expreso mis más sinceras condolencias a la familia del fallecido”, agregó.
El avión, que transportaba a un total de 211 pasajeros y 18 tripulantes, aterrizó de urgencia en la ciudad de Bangkok, donde los heridos fueron atendidos.
El resto de pasajeros viajaron ayer a Singapur, el destino inicial del vuelo, en otro avión.
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Con información de Excélsior